Alan Woods concluye su gira por México hablando de las Internacionales Obreras en el Sindicato de Maestros [1]
Escrito por:
La Izquierda Socialista

Al iniciar la Escuela todas las sillas del auditorio estaban llenas, varios compañeros se tuvieron que presenciar la charla en la parte de atrás del ponente y una veintena de personas tenían que escuchar la charla desde afuera del auditorio. En total nos encontramos alrededor de unos 150 compañeros. Sumando el conjunto de charlas que realizó Alan Woods en la Ciudad y Estado de México, el dirigente de la Corriente Marxista Internacional habló frente a más de medio millar de personas. Habría que señalar que muchos compañeros de Morena no pudieron asistir a las actividades porque en esos días se realizó la asamblea Estatal en el DF y las diversas actividades de convocatoria y preparación se lo impidieron. Las ideas del marxismo siguen teniendo una gran audiencia y explicadas de manera correcta, un gran eco entre los trabajadores y la juventud.
Alan habló durante una hora sobre la historia de las internacionales, explicó que la Asociación Internacional de los Trabajadores, pese a sus avances sólo es un anticipo, nunca logró ser una organización de masas. Desde el punto de vista ideológico tampoco fue una Internacional marxista. Marx y Engels solo eran una tendencia, como también lo fueron los seguidores de Proudhon o de Bakunin. La Asociación Internacional de los Trabajadores permitió dar la lucha por la claridad ideológica. Haciendo una analogía, Alan dijo que si se construye una casa necesitas cimientos sólidos. En una organización esos cimientos son la teoría.

Lenin en esos tiempos señaló que la segunda internacional había muerto y había que construir una nueva internacional. Si bien esas palabras son completamente correctas, Alan aclaró que en ese momento no escribía Lenin para las masas sino para un pequeño grupo de cuadros. Pero un partido de masas del proletariado sólo puede surgir en base a la experiencia de las masas. Los Partidos Comunistas surgen de la experiencia de la Revolución Rusa en primer lugar y en segundo lugar de las viejas organizaciones reformistas. Bromeando un poco dijo que los comunistas no son como angelitos que llegan volando de un cielo despejado, quienes construyeron los Partidos Comunistas eran los antes obreros reformistas.
Puedes despotricar contra los partidos reformistas, pero ellos tienen a las masas. Con el fuerte impacto de la Revolución Rusa se forman corrientes de oposición pro-bolchevique en estos partidos, algunos de ellos se querían escindir como los sectarios que siempre se quieren escindir. Ejemplificó con el caso del Partido Socialista Francés, donde esa era la idea inicial de los comunistas, pero al dar la batalla a lo interno finalmente ganaron la mayoría con 2/3 partes y los reformistas fueron los que terminaron escindiéndose. El PCF se forma en base a la crisis de la vieja organización reformista.
Sin entrar a detalles mencionó el proceso de degeneración de la URSS que dio paso al Estalinismo, eso tuvo su efecto en la Internacional Comunista que degeneró, un ejemplo muy claro de su descomposición se vio en Alemania donde por culpa de la socialdemocracia y los estalinistas, Hitler podo tomar el poder con las enormes consecuencias que esto significó.

Trotsky no acertó en las perspectivas después que terminara la Segunda Guerra Mundial, era un panorama complejo y ni Stalin, ni Churchill ni Roosevelt acertaron. Trotsky en 1938 escribió que en 10 años no quedaría piedra sobre piedra de las viejas Internacionales. Tenía en mente a los partidos socialdemócratas y comunistas. Dijo que la Cuarta internacional sería la fuerza decisiva del planeta. Alan Woods preguntó a la audiencia ¿La cuarta internacional es la fuerza decisiva del planeta hoy? ¿Es la fuerza decisiva de México? ¿De alguna fabrica en México? La cuarta internacional como organización ha sido barrida del mapa, eso sí, puntualizó, las ideas de Trotsky, el programa de Trotsky es más relevante que nunca.
En una conversación entre Pável Sudoplátov, un dirigente de la GPU quien organizara el asesinato de León Trotsky, y Stalin, el primero se oponía en un inicio al asesinato de Trotsky porque desenmascararía el aparato secreto estalinista, pero Stalin dijo que no, que sin Trotsky la Cuarta Internacional no es nada, no tienen dirigentes serios. Desgraciadamente esto fue cierto, ninguno de los dirigentes de la Cuarta Internacional, ni Cannon, ni Hanssen, ni Frank, ni Mandel, ni Lambert, ninguno de ellos estaba a la altura de Trotsky.
Después de la Segunda Guerra Mundial se da una explosión de las fuerzas productivas sin precedentes y un prolongado crecimiento económico. Los reformistas se vieron fortalecidos pues había margen para reformas, los estalinistas también se vieron fortalecidos. Los dirigentes de la 4ª Internacional en vez de reorientar se aferraron las perspectivas como un dogma aun cuando estas no correspondían a la realidad. Hubo una excepción, los trotskistas británicos bajo la dirección de Ted Grant. Había una base del trotskismo en Sri Lanka, Bolivia, etc. pero el resultado fue la degeneración y destrucción de la 4ª internacional.
Nosotros fuimos expulsados 3 o 4 veces de la 4ª internacional. Todas estas veces las razones fueron diferencias políticas, “es impensable que Lenin o Trotsky expulsaran a alguien por tener diferencias políticas, las diferencias se discuten, se debaten… expulsar por esta razón es Estalinismo o Zinovievismo para ser más exacto”, apuntó Alan. También recordó la última vez que fuimos expulsados de la 4ª Internacional, Ted Grant dijo que si daban ese paso les darían la espalda y se orientarían a la clase obrera y sus organizaciones y así fue.
Alan concluyó diciendo ¿Debemos ser pesimistas ante esto? No, yo sigo defendiendo las ideas de Marx, Engels, Lenin, Trotsky y Rosa Luxemburgo también, son las únicas ideas que sirven a la clase trabajadora. Nosotros en condiciones difíciles hemos empezado a organizar, a reagrupar las fuerzas del marxismo a nivel mundial. No proponemos declararnos un nuevo partido o una nueva internacional, sino un grupo organizado dentro del movimiento obrero. Optimistas somos. La lucha por la internacional, la lucha por la revolución socialista no es sencilla y si alguien quiere una vida fácil sería mejor que hubiera nacido en otro tiempo. Frente a la audiencia Alan prosiguió: No les ofrecemos un camino fácil, les ofrecemos un camino difícil de mucho trabajo y mucho sacrificio. He luchado durante décadas y por primera vez siento que comenzamos a nadar con la corriente. No nos preocupa que hoy no haya Internacional, tampoco le preocupa a Marx o Engels, las ideas sí se mantienen. Selló su introducción con estas palabras: “No tengo la menor duda de que el futuro le pertenece al marxismo”, invitó a unirse a La Izquierda Socialista, a la Corriente Marxista Internacional para luchar por la única cosa que vale la pena sacrificarse, la causa por la revolución socialista mundial.
Hablaron compañeros miembros de La Izquierda Socialista que también participan en el SME, en el SUTIEMS, en el ala democrática del SNTE, en el Morena del DF y del Estado México, así como estudiantes de la UNAM. Se habló de diversos temas como el socialismo utópico, la degeneración dela URSS o sobre el anarquismo en la primer Internacional. Un compañero habló del impacto de las internacionales en el movimiento obrero en México dejando en claro que la historia de la lucha de clases en nuestro país no está al margen de la historia del movimiento marxista y revolucionario a nivel internacional.
Hubo una participación que distorsionó, donde un compañero se paró a denunciar a la CMI como reformista poniendo como prueba que participamos en el movimiento bolivariano burgués de Venezuela. Alan en su respuesta no quiso dedicar mucho tiempo a este compañero que en realidad no tuvo eco alguno entre los asistentes, pero si puso un ejemplo de Venezuela en donde conoció a un compañero con una postura similar que denunciaba a Chávez como burgués y tenía una organización de 17 personas completamente aisladas mientras el PSUV se constituía con millones de personas. Alan reiteró que se debía participar con las masas estén donde estén.
La construcción del partido tiene dos partes, la formación de cuadros en primer lugar, la segunda parte es la táctica para llegar a las masas, necesitamos participar en las organizaciones de masas pero defendiendo un programa marxista.
Alan dijo que las cosas están cambiando a nivel mundial, ha cambiado en Turquía, en Egipto, en Brasil y cambiará en México. No dudó que la clase obrera en nuestro país se levantará, la pregunta es si cuando esto pase estaremos preparados. “Eso no depende de las masas, depende de ti personalmente. Te tienes que decidir que vas a hacer con tu vida, vas a ser una víctima impotente de la historia o vas a luchar conscientemente para acabar con esta pesadilla”.

Este sistema está en decadencia y no nos ofrece un futuro digno, te invitamos a luchar y a construir las fuerzas del marxismo en México y a nivel internacional. Contacta con nosotros a laizquierdasocialista.org@gmail.com [2]

Fecha:
Noviembre de 2013