En medio de los escándalos que ocasionan los candidatos asociados al narcotráfico de Nueva Izquierda en el PRD, un préstamo de 40 mil millones de dólares para saciar la sed de dinero de gente como Slim y Roberto Hernández y los cambios en el gabinete de Cuba, el movimiento obrero sigue irguiéndose y da muestras de su frescura y capacidad: por todos lados surgen batallas en defensa del salario y las condiciones laborales, ya sea en las escuelas, en las minas o en las fábrica de Olympia. En Venezuela y otras partes del mundo mientras tanto, nuestros hermanos de clase hacen lo propio para no dejarse aplastar. A continuación presentamos la edición 180 de Militante, Voz Marxista de los Trabajadores y la Juventud. Invitamos a los lectores a que lo utilicen como herramienta de análisis y organización en sus centros de trabajo, escuelas o colonias.
La actual crisis económica está resultando fatal para la clase trabajadora, en cuanto a los empleos formales se reconocen oficialmente el despido de aproximadamente 600 mil trabajadores desde octubre del año pasado a la fecha. Este es el resultado de medidas implementadas por la burguesía consistente en reducir costos de producción recortando la plantilla laboral o como consecuencia del cierre de empresas y fábricas que sucumben ante las actuales circunstancias.
La infiltración de los chuchos en el PRD es innegable y totalmente cínica, como muestra las declaraciones que ha hecho el diputado perredista perteneciente a esta corriente, Víctor Hugo Círigo, en su iniciativa de ley la cual intenta legalizar las drogas.
Para muchos, la crisis económica por la que estamos atravesando se está reduciendo a la pérdida indiscriminada de empleos. Cientos de patrones están utilizando los despidos masivos so pretexto de conservar fuentes de trabajo, otros tantos están reduciendo los salarios y muchos más están empleando los paros técnicos para, según ellos, salvar sus empresas. Lo cierto es que, detrás de todo ello, quienes verdaderamente pierden son los trabajadores y sus familias.
La bancarrota del capitalismo oprime cada vez más a los trabajadores del mundo. En México, millones de trabajadores laboran en condiciones precarias y miles han perdido su trabajo en los últimos meses. Incluyendo a los educadores del país, muchos trabajadores han sido afectados en sus derechos laborales por las políticas privatizadoras y contrarias a los trabajadores asumidas por el gobierno espurio de Felipe Calderón.
La situación de la clase trabajadora cada vez es más insostenible. Contrariamente a las miles de promesas de crear más empleos y mejorar los salarios, el gobierno espurio de Calderón no hace más que atacar las condiciones laborales de los trabajadores llevando a una gran capa de estos a una situación de miseria. Por otro lado, los trabajadores están impulsando fuertes luchas en defensa de sus puestos de trabajo y por mejoras salariales, dada la situación de crisis que estamos viviendo.
Cancún es uno de los centros turísticos más populares de México y el mundo, después del paso del huracán Wilma en 2005, sus playas quedaron muy dañadas y los índices de turismo comenzaron a bajar, lo que trajo pérdidas millonarias para los dueños de los hoteles y centros turísticos de la ciudad.